tu montón sobre el montón central, esperando que tu carta sea del mismo color, del mismo valor o superior, porque si no, ¡te llevas todas las cartas del montón! ¿Y qué pasa si la carta del centro es bajita?, que seguro que alguno de tus compañeros de mesa te retarán gritándote ¡Gallina!
¿Tendrás el valor de sacar carta y arriesgarte, o preferirás recibir una penalización algo más leve? Un juego de riesgos y ataques, ¡lleno de momentos divertidos!